Receta especiada

Coger un gran recipiente de barro cocido y purificado en el fuego de Lanka . Colocarlo sobre la mesa y bailar mientras se añaden los ingredientes.

- Un puñado de leche de gallina para que nos ayude a curar las heridas del alma.
- Dos pizcas de cilantro para que toda la rabia se congele.
- Tanta lavanda como sueños, ilusiones e inocencia necesitemos. Nota: no escatimar.
- Siete flores de alheli para ser bellos y modestos.
- Tres cucharadas de sauce en polvo para afrontar las tormentas con fuertes raices.
- Una cucharada de cúrcuma por cada problema para no perder la esperanza.
- Un cucurucho de papel lleno de tilo para una salud completa.
- Cinco hojas de laurel para andar el camino con los ojos abiertos.
- Tres dosis de albahaca para integrar los instintos.
- Tanto hipérico como miedo y tristeza tenga el corazón.
- Cerrar los ojos y añadir aquellas que faltan y son susurradas.

Mezclar todo con las manos acariciándonos hasta el codo, guardar en saquitos y ponerlos bajo la almohada de aquellos que necesitan comer.